sábado, 23 de mayo de 2015

“Es esencial que no perdamos a los turistas ´de paso´. Por Guillermo Barragán

(Aclaración previa: En todos los lugares donde se lea “camiones” debe entenderse como los camiones de paso que tenemos por nuestra localidad y no lo que vienen a proveernos que son indispensables para el día a día).

Villa la Angostura es una localidad en la que toda la economía, exceptuando al empleo público, depende directa o indirectamente del turismo. El ministro Bertoya informó que “el turismo ya es la segunda economía de la provincia”. Si bien es cierto que cada vez existe más Villa la Angostura como destino turístico, también es cierto que seguimos siendo una ciudad de paso para el camino de los 7 lagos y el cruce a Chile y ese turismo, con esta circunvalación lo perderemos totalmente.

Yo trabajo en un restaurant en plena Av. Arrayanes y les aseguro que la cantidad de turistas “de paso” que deciden parar en nuestra localidad para almorzar, recorrer un poco y seguir viaje hasta su destino final es enorme. Todos los días, al almuerzo, hay por lo menos tres mesas (en temporada baja-media) de turistas que están yendo de Bariloche a San Martín o Chile o lo están haciendo en el sentido contrario.

Es esencial que a estos turistas no los perdamos.

He hablado con mucha gente, algunos a favor y otros en contra, sobre este tema y me parece importante repasar los tres principales argumentos que se plantean como favorables en todas las discusiones que he mantenido:

-Va a reorganizar el tránsito: Esta es una verdad a medias. Actualmente tenemos el problema de que los camiones pasan por el centro de nuestra localidad y circulan por lugares urbanos. Con la circunvalación esto no va a cambiar. La ruta planificada hace 36 años y con una población del 10% de la actual, corta a un barrio al medio y deja a unos cuantos más desafectados de su traza, con lo cual seguirán pasando los camiones por lugares muy urbanizados y con mucho tránsito urbano.

-Va a haber más trabajo: Otra verdad a medias. Habrá más trabajo en la medida en la que se tomen empleados locales para la construcción de la ruta y, aun así, se nos presenta el problema de qué hará esa gente una vez concluida la obra.

-Va a permitir que se haga el Centro Comercial a Cielo Abierto: Cierto. Al no existir más la necesidad de que el tránsito pase por la avenida principal se permite que se haga peatonal el centro. Mi pregunta es entonces para qué creen que viene la gente a Villa la Angostura: ¿A comprar cosas o a disfrutar del paisaje?

La ruta de circunvalación es, como dice la gran mayoría de las personas, “una sentida necesidad de muy vieja data” y por más cierto que sea de muy vieja data (demasiado vieja si tomamos en cuenta que fue proyectada hace 36 años) no estoy para nada de acuerdo con que sea una sentida necesidad. El hacer una ruta de circunvalación surge del imperioso deseo y la urgente necesidad de sacarnos de encima a los camiones que nos enloquecen el tránsito todos los días en nuestro pequeño centro comercial y turístico. El asunto es que sacando los camiones del cuadro no queda problema para resolver.

Al hacer una circunvalación van a generarse tres fenómenos: el primero es que dejarán de pasar por el centro de la villa los camiones que tanto nos molestan hoy en día (aunque seguirán pasando por el medio de zonas altamente urbanizadas), el segundo es que dejarán de pasar por el centro de la villa la gran mayoría de los turistas de paso que generan la mayor cantidad de movimiento durante la temporada baja y el tercero es que ocurrirá lo mismo que ocurrió hace tantos años cuando se construyó la actual ruta a tres kilómetros del centro de la villa y, de a poco, todos se fueron mudando a la vera de la misma para conseguir atraer a quienes están afectados en el segundo de estos fenómenos, los turistas. Crearemos entonces un nuevo problema a futuro: Ruta de circunvalación con negocios y desarrollo inmobiliario a sus costados, tránsito lento de particulares y de camiones y la necesidad de otra circunvalación.

Creo que de todas maneras hay algo que es claro en todas las opiniones y es que nadie quiere más camiones.

Quiero remarcar lo más importante de toda esta cuestión: Sin camiones no existen estos problemas. Sin camiones no es necesaria una ruta de circunvalación.

Otro aspecto a tener en cuenta es que Villa la Angostura actualmente no tiene capacidad para contener semejante obra. Tenemos problemas en el suministro de gas, de luz y de agua además de no tener capacidad en las escuelas (cabe recordar que a principio de este año 90 chicos no tenían espacio en las aulas), una sola estación de bomberos, una sola comisaría, la dificultad de alquilar una vivienda digna con el sueldo básico por la falta de viviendas y un largo etcétera que me haría pasarme de los escasos 10 minutos que tenemos cada uno de los expositores.

No me voy a adentrar en los enormes problemas ambientales que este proyecto generaría, pero sí quiero recordar que en nuestra Carta Orgánica en el capítulo 6 el punto 4 se “Promueve la participación ciudadana en la toma de decisiones ambientales”.

Quiero entonces pedir que se haga un estudio de impacto económico, que se tomen urgentemente medidas para mitigar el tránsito pesado, que se haga un estudio de impacto social y que se hagan talleres participativos de los que salgan nuevos lineamientos sobre el futuro de nuestra localidad.

Guillermo Barragán

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