miércoles, 20 de mayo de 2015

Que el biociànico de cargas no destruya nuestro bosque. Por Natalia Belenguer

Voy a hablar como ciudadana de la localidad, como madre, como educadora trabajadora de la palabra y como habitante de Latinoamérica.

Como ciudadana absolutamente preocupada porque mucha, muchísima gente, no está enterada ni informada acerca del tema. No está al tanto de una obra de semejante envergadura . Gente que ocupa su tiempo en trabajar para ganarse el pan, y que supone que los funcionarios realizan responsablemente su trabajo. La información es un derecho de la ciudadanía y que se avance sobre “la ruta de circunvalación” sin haber debatido el tema socialmente es una irresponsabilidad total. Es un acto antidemocrático. ¿Cuándo se hizo la consulta pública a la población? ¿ Entre quienes hubo tantas idas y vueltas de información? ¿De qué mayoría encuestada se habla en los informes? ¿De qué talleres con la comunidad hablan? Vivo en la localidad soy una ciudadana informada y en este caso me reconozco absolutamente ignorante. Nunca me enteré de nada de esto.

Como ciudadana que muchas veces no tiene tiempo de participar, pero más de una vez ha sentido ganas de cuestionar obras. Por ejemplo cuando instalaban las luces de la avenida me pregunté si era necesaria realmente tanta contaminación visual, tanto caño en el medio de la avenida ¿para qué?, bueno , dije iluminarán más? y hoy veo que no sólo contaminan visualmente , sino que no iluminan nada y parecen un gran arbolito navideño, titilando en la avenida. Por lo tanto con el tema circunvalación, me dije, participo.

Como Ciudadana que cuando decidió tener una familia se fue de Bahía Blanca ciudad que en pos del tan mentado progreso y del trabajo contaminó (con petroquímicas) su aire y su mar. Datos absolutamente negados por los gobiernos, pero más que evidentes para la población y los científicos.

Ciudadana que cuando conoció La Angostura no pudo más que maravillarse y agradecer ese increíble manto boscoso sobre los faldeos de los cerros y que sigue maravillándose en cada estación, del mismo modo que lo hace el turista. ¿ a dónde han visto otoños cómo los del bosque andino patagónico?

Una ciudad dentro de un parque nacional, una ciudad diferente, con un contexto diferente. Estamos en la reserva binacional de biosfera. Un dos por ciento del territorio nacional.

Dos por ciento de bosque sobre el que se piensa en hacer megarutas, circuitos de moto cross y canchas de golf, en medio del bosque andino patagónico. ¿No es una irresponsabilidad? ¿qué derecho tenemos nosotros como municipio a intervenir despiadadamente un patrimonio nacional y mundial como es el bosque. La belleza del bosque, del paisaje?

Ciudadana que ve día a día cómo se degrada este medio ambiente tan frágil, sin ningún tipo de control, ni de asesoramiento a los nuevos vecinos que han elegido vivir dentro de un parque nacional. A la hora de desmontar nadie, nadie recomienda ni sugiere dejar autóctonas. Conocí chilenos que mientras observaban el paisaje me dijeron, qué suerte que en tu país se protegen a los bosques, nosotros del otro lado, teníamos lo mismo, pero nos encargamos de destruirlo.

También escuché decir a locales con un dejo de tristeza: “ la gente viene maravillada a vivir acá y al tiempo quiere repetir el paisaje urbano”.

Qué triste que no nos demos cuenta del rol del bosque, qué triste que nos mueva el biociánico de cargas para talar no menos de 20 hectáreas ( hasta 40?) como mínimo 15 mil ejemplares únicos en el mundo y , señores, que contribuyen a una belleza única que el turista ama.

Y hablo tanto del turista porque parece que quienes defendemos a la naturaleza estamos en contra del beneficio económico de la localidad. Porque ya vamos a escuchar “esto va a traer trabajo y progreso “. Como si talar 6 kilómetros por 200 metros de bosque fuera la única opción de ofrecer trabajo. Ya tuvimos esos espejitos de colores. Con todos los desembarcos de Salvadores del pueblo. Compramos todos los discursos de salvación, pero se oyeron pocas ideas creativas. Dejemos de pensar linealmente. Es más fácil descalificar al otro que intentar escuchar sus razones y ya es un discurso perimido el “se oponen a todo”, escuchen antes de descalificar. Señores no se equivoquen, el turista, viene por la belleza natural. Y si nosotros nos encargamos de destruirla, nos dañamos a nosotros mismos. Nosotros somos naturaleza, y el problema está en haberlo olvidado.

Como madre, como educadora trabajadora de la palabra

Como madre y educadora , me maravillo de los trabajos acerca de la naturaleza que se realizan en jardines y escuelas. Se les enseña a los chicos a reconocer las especies nativas, sus funciones y aprenden , sobre todo a respetarlos. Los niños aprenden a respetar a la flora y fauna autóctona, cantan canciones, pintan dibujos, se los lleva a caminar por senderos interpretativos.

Ellos son las generaciones futuras. Y la modificación del ambiente, ya hoy los interpela: hace unos dìa mi hijo me dijo ¿ viste mamà que no vienen más los carpinteros? Ya van a venir , dije para tranquilizarlo , y sentí una opresión en el pecho.

Del mismo modo me sorprendo cundo se acusa a la juventud de la falta de valores, de ser las ovejas descarriadas de la sociedad.

Señores, cómo creen que se sienten los jóvenes frente a adultos que dan estos ejemplos. Les enseñan amar a la naturaleza y luego la destruyen frente a sus ojos, solo por justificativos económicos, tales como la rentabilidad, la conectividad y por el tan mentado progreso, ¿hay solo 1 tipo de progreso? Esto es lo que nos han hecho creer.

Esto lo viví como docente en una Cepem con orientación turística. En el que primó la enseñanza sobre Parques Nacionales, la flora, el respeto, etc. Sin embargo en esos años en que trabajé allí escuché alumnos que muy angustiados comentaban sobre la tala indiscriminada en el ejido

Quienes se ocupan de no informar a la población también pisotean a nuestros niños y jóvenes, si señores, pisotean sus derechos, sus deseos de un ambiente protegido, realmente protegido.

Los tan mentados valores que ¿los jóvenes han perdido?. Díganme

Desde hace años, 18, les pido a mis alumnos que citen los autores de textos que trabajan, ¿Cómo les sigo explicando a los alumnos que está mal plagiar, copiar y pegar cuando el primer estudio de impacto ambiental presentado por la consultora copió y pegó textual de un estudio de impacto ambiental de la de la provincia de Córdoba? ¿ cómo se les explica a los jóvenes los valores que sustentan estas acciones? Señores ¿cómo se les explica? De los Copie y pegue. ¿Esta es la gente que decide por nosotros por dónde y cómo tienen que pasar los camiones? ¿ Esta es la gente que decide el futuro de nuestra localidad? Dígannos ¿Qué hacemos con esta sensación de vergüenza ajena?

¿A dónde estuvo la información en las escuelas primarias, en la escuela media?, ¿a dónde se los informó a los docentes? A donde están los carteles en la vía publica como cuando hay elecciones? ¿A dónde los spots radiales?

¿ O se supone que los ciudadanos por generación espontánea deben participar y enterarse casi por ósmosis de los que se está pensando para sus sociedad? No es serio.

Hay un evidente manejo de la información y sus implicancias serán nefastas-.

Esto también es hablar del proyecto de la ruta de circunvalación

No estamos en contra del “progreso”. Sí, absolutamente en contra de la destrucción de la naturaleza.

Como habitante de Latinoamérica

América fue el botín infinito de Europa desde su descubrimiento, como explican numerosos autores, fue la contracara de la modernidad Europea . Estas reflexiones empezaron hace mucho tiempo Ya José Martí, que además de poeta y escritor de palabras lindas reflexionaba sobre su entorno, lo explica en el ensayo nuestra América. Estas reflexiones se relacionan, aunque no lo crean con el bioceánico de cargas. Con el poder, con los modelos extractivistas de destrucción del medioambiente. De mismo modo hay , en la actualidad, una perspectiva de estudio llamada el giro decolonial que plantea algunos conceptos básicos que me interesa relacionar con la ruta de circunvalación:

La llamada modernidad impuso un modo de pensar el mundo

(imagen) y nunca nos animamos a pensar, por ejemplo este mapa :

Impuso un patrón civilizatorio hegemónico que impone un dominio científico/ tecnológico sobre la naturaleza. Y todos sabemos que hoy como explica Edgardo Lander “ centenares de millones de personas viven el impacto de severas transformaciones naturales: sequías, inundaciones, reducción de la disponibilidad de agua, pérdida de diversidad biológica, de suelos fértiles, desforestación, etc.” ( Lander, 82)

Necesitamos salir de la lógica binaria de buenos y malos de evolucionados y retrógrados. Que nos retrotraen a las tan mentadas Civilización y barbarie. Ya que la enunciación de estos pares binarios esconde una supuesta jerarquía de unos sobre otros.

Deberíamos, por el contrario pensar en, un mundo habitado por muchos mundos, donde las ideas, la generación de múltiples ideas nos lleve a soluciones consensuadas y no impuestas. Por eso señores aplanar, minimizar, con el discurso estos temas, muy complejos diciendo “ a favor o en contra” solamente es hablar de una ignorancia peligrosa. No debería tratarse de enfrentar a la población, sino de coordinar, de acompañarnos en la construcción del futuro de la localidad. Eso es al menos lo que enseñamos en las escuelas.

Hay que desmantelar y cuestionar las supuestas bondades de un modelo de desarrollo sustentado en la destrucción de su territorio.

Es necesario pensar el futuro de localidad, (hoy con el tema de la ruta) de nuevo y entre todos adhiriendo a la definición de Territorio que dice que un territorio es el sentido (significado) dado a un lugar, cuya definición es validada por una comunidad.

La gran pregunta es ¿Qué significado a futuro le queremos dar a nuestro territorio?

¿No se puede pensar en una consulta popular vinculante? Aprovechando que tenemos que votar intendente y presidente en octubre

Les pido de que en caso de que decidan, a pesar de haber escuchado tantas voces en contra, y que serían muchas más si la población estuviese informada, si a pesar de esto, deciden hacer ese desastre ambiental que dan en llamar avenida de circunvalación, les pido, que figuren los nombres, se digan en voz alta. Y que todos conozcamos con fotos también a los responsables de avalar la obra, para que cuando en lugar de mostrar bosque nativo tengamos que mirar asfalto y cemento, podamos decirles a nuestros nietos y bisnietos . Quienes son los responsables de este proyecto, para explicarles que no es un proyecto de toda la comunidad que habita en el 2015 en Villa La Angostura.

Para terminar cito al gran García Márquez en su discurso de recepción del Nobel “ la soledad de América Latina”:

“la indepencia del dominio Español no nos puso a salvo de la demencia”

 Gracias!

Natalia Belenguer

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